Los secantes son compuestos químicos que aceleran el secado de las pinturas formuladas base solvente, así como de las tintas para impresión y de barnices que secan por auto oxidación (por oxígeno presente en el aire).
Los secantes son generalmente carboxilatos metálicos disueltos en solventes compatibles. El proceso de secado es la conversión de un recubrimiento líquido en una película sólida. En el caso de los alquidales, el proceso de secado comienza con la evaporación del solvente y una absorción simultánea del oxígeno de la atmosfera, esto seguido de una serie de reacciones químicas a las que en conjunto se les llama polimerización auto-oxidante y que arrojan como resultado un endurecimiento progresivo del recubrimiento aplicado. Sin embargo, si no se utilizan secantes el tiempo de reacción es excesivamente largo por lo que con la adición de los secantes el tiempo de secado es disminuido a un nivel aceptable. En resumen, la función del secante es simplemente acelerar y modificar la tendencia natural hacia la formación de la película.